4.25.2005

El secreto está en no sentir

Amanece, otro lunes más y el cuerpo simplemente no responde, trato de tranquilizarme, respiro profundamente, y sin control lágrimas aparecen, una tras otra, miles tras miles, como si el mar estuviera explotando a través de mis ojos…

Saco todo el llanto al desvanecerme lentamente hasta el suelo, ya no puedo… ¿por que tenías que haberte ido de mi justo ahora que te necesito tanto?…

Me desahogo dentro de mi misma, exhalando uno que otro sollozo a fin de eliminar este dolor que me esta matando…

Respiro y como siempre trato de justificar los sentimientos, tranquila nena, es normal son días pico y llenos de hormonas que como siempre te juegan malos escenarios…

Y en realidad no tengo justificación ni culpa alguna, como tampoco la tiene él al no sentir amor por mí…. ¿Por qué eleve mis cielos a algo más que mis propias alas?
¿Podré levantarme de esta? ¿Habrá otro día para amar? … “no basta con amar, habrá también que ser amado”, la frase resuena en mi cabeza y mi corazón emula un tic tac, y dice, solo es cuestión de tiempo… y yo solo respondo con un sofoco intenso ¿qué hago con este dolor, con estos sueños y estás ganas?? ¿En dónde las boto?

No hay tiempo ni esfuerzo para responder, me encuentro en la oficina y mi mente se concentra en los requerimientos de la sesión, mi mirada se pierde en los ojos del cliente que está ávido de conocer como podrá mejorar sus procesos. Respondo las prácticas específicas y mi mente vuela al mismo tiempo al temple que tuve al levantarme en el desgarre previo al presente… digo, evidentemente puedo… si puedo.

La sesión se interrumpe y mis deseos vuelven a ser los mismos, mis metas no se afectan, solo cambia que ahora lo realizaré sin él, no se trata de que sea alguien más porque evidentemente puede ser, es solo que mi corazón y mis cielos habían encontrado un dueño anexo a mi al cual querían abrazar.

Respiro nuevamente y me apapacho, no más lágrimas, no más llanto, después quizás por julio puedas tener todo el tiempo para llevar a cabo un duelo, por hoy no hay espacio, no hay pecados ni mucho menos razones para engrandecer aun más los dolores, déjalos pasar, por ahora no sientas, hay mucho que dar y si ahora no encuentras algo de luz, no te preocupes ya vendrán días mejores.

No comments: