Hace unos días, para variar un poco me fui al cine y me encontré con una historia bonita: Dear Frankie, algo que además de mis días sensibles me muestra todo lo que es capaz de realizarse por la persona amada, en este caso a través del poder de una madre.
Se trata de un niño de 9 años que vive mudándose constantemente en compañía de su madre y de su abuela. La mamá para proporcionar más del cariño que ella misma puede dar, le inventa como padre ficticio a un marinero, con el que Frankie se comunica a través de cartas que la mamá responde y que cada vez se promete será la última para no dar más esperanzas ni sueños a su hijo. Sin embargo es tarde ya que Frankie tiene registrado en la cabeza y el corazón todos los lugares visitados y para cerrar conoce el nombre del barco en el cual papá trabaja y que mamá nunca imagino que existiría. En alguna visita por un compañero de clase Frankie se entera que el barco de papá se hospedará unos días en la misma ciudad en la que se encuentra y sin más sueña con verlo. La mamá de Frankie también sabe de la llegada del barco y pasa una noche en vela pensando como localizará a un padre que sostenga los cielos que fabrico para su hijo. Un hombre sin pasado ni futuro, eso piensa es lo mejor... su amiga y compañera de trabajo le propone a alguien, se ponen de acuerdo serán unas cuantas horas, un poco de dinero y listo.
El encuentro se realiza y ante dos almas bondadosas el milagro se da, se concilian como padre e hijo, el padre se ha leído todas las cartas y se ha involucrado plenamente con los abrazos de Frankie, solicita más tiempo pero con él y mamá, el dinero prometido se regresa pues el cariño ha puesto raiz. Frankie ilusionado pasa los mejores momentos con las personas que más ama. Total que sellan la despedida con un tierno beso, pero la mamá con el padre ficticio y bueno se cierra la historia, Frankie se da cuenta de todo y le escribe comentando la muerte de su verdadero padre y de la forma en que su madre lo ha protegido al conseguirle un papá, al cual el sigue sintiendo real. Frankie es sordo y no es hasta casi al final de la película cuando se explica la razón de la mudanza constante y de la ausencia del sonido en el niño.
Padre, madre, abuela, hijo, amor, lo interesante de esto es la forma en la que se transmite el sentimiento y cariño para Frankie. Final abierto en el cual en pleno muelle, Madre e hijo se conjuntan en un mismo espacio.
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