11.24.2006

...

El olor del aire aglutinado en esta ciudad me ha hecho verte otra vez, algo de ti sigue vigente, en esta tierra, en este viento... nazco evidentemente al vivirte, al gritarte con la boca bien abierta, recapitulando el caminar sobre las calles que nuestros pasos unieron, en ese tiempo, en ese entonces, en ese aquí que entre tormentos quisiera desaparecer –como si realmente pudiera-... y luego sin siquiera tocarlo, lo siento aquí... adentro, donde sé que no es todo pero que en esos momentos me llena de dicha, de luz, de esa humedad que solo contigo tengo... la sensación me cubre toda la piel y revivo, los gemidos me sacuden, las mordiditas, el ser uno solo... tu sobre mi, sobre mi piel, sobre mis ganas, sobre ese nosotros en ese instante perdurable... a lo lejos escucho un si tu no vuelves, aunado al resplandor existencial de ven, quiero tenerte.. te abrazo en el halo que el recuerdo abre y entre mis piernas te cobijo... huelo tu vientre caliente, tu respirar agitado, tu sexo hirviendo dentro de mi... otra luz, otro deseo... el superar la resurrección alucinante, la entrada a este mundo siendo un poco tú, tu un poco yo... siento tu beso, sin despedida... sin miedo... aquí estoy... abre los ojos.

2 comments:

fgiucich said...

Cuando uno ama de verdad, cualquier detalle que se nos aparece en el camino, nos recuerda a ese ser amado. Abrazos.

Anonymous said...

"y al final, vuelta a empezar... dos horas después de amanecer..."